Hace unas décadas, ver la televisión era una actividad que se hacía en familia y con toda la atención puesta en la pequeña pantalla. Los espectadores se sentaban en el salón de casa, veían todos juntos la televisión y comentaban lo que estaban viendo y lo que tenían delante. Nada distraía su atención y nada interrumpía el proceso de visionado. Con el paso del tiempo las cosas cambiaron. Primero las casas se llenaron de televisiones en las que cada uno podía ver lo que quería y rompió la dinámica de la familia unida. Luego apareció internet y la cosa cambió todavía más.
El pasado martes culminó en Perú la ya tradicional ficción original Al fondo hay sitio de América TV, con impresionantes cifras de rating.
La serie, que va por la séptima temporada en Perú, demostró que sigue sorprendiendo a los peruanos con un promedio de 40,2 puntos de rating en su segunda hora de emisión durante el prime time. En la primera hora llegó a los 33,9 puntos.
Este jueves 3 de diciembre debuta Familia moderna en la pantalla de Mega, la versión chilena de Modern Family, la premiada serie estadounidense de la cadena ABC.
Según adelantaron a ttvnews desde el canal del Grupo Bethia, la serie será programada los días jueves y domingos a medianoche.
Gunn Report presentó los spots que se quedaron con un lugar entre “Los veinte mejores comerciales del siglo 21”. Hay producciones de agencias de Estados Unidos, Francia, Italia, Inglaterra, Alemania, Holanda, Canadá, Australia y Argentina. El único spot iberoamericano que figura es Dads in Briefs, de Del Campo S&S Buenos Aires para BGH. La agencia W+K fue la que más piezas ubicó dentro de la lista, ya que cinco spots suyos de las oficinas de Portland, Amsterdam y Londres se ubicaron como favoritos.
El cine, la televisión, los videoclips musicales, los videojuegos… El “product placement” echa sus tentáculos allí donde le dejan y sale casi siempre airoso. Bien es cierto que a veces peca de excesivamente descarado, pero metido con calzador o no, el emplazamiento de producto es una fórmula publicitaria a la que el paso del tiempo no ha ajado ni mucho menos sino todo lo contrario.
Cuando se hace bien, el “product placement” gana por goleada en eficacia a los sacrosantos spots televisivos y, en vista de sus excelentes resultados, los anunciantes siguen gastando a manos llenas en esta fórmula.